La Imagen Coronada

La Imagen que recibió el honor de la Coronación canónica el 19 de diciembre de 1926, ante medio millón de chilenos, fue esculpida en la Casa Rorissier de París en 1826-1828, encargada por Don José Ramón Ossa y Mercado (socio propietario de los minerales de plata arqueros), para su culto particular en su casa de Copiapó. Patrones y mineros aportaron conjuntamente por una promesa, los dineros para costear la escultura y su envío a Copiapó. En los archivos de la Cofradía se conserva una fotografía que demuestra la estadía de la Imagen en la iglesia -hoy catedral de Copiapó- firmada por Doña Luisa Figueroa de Vergara y fechada 1828. Costó la suma de dos mil pesos oro. 

Fallecido José Ramón Ossa, su viuda, Doña María Dolores, se fue con la Imagen a Santiago. Se estableció en la calle Cochrane con Alameda de las Delicias, en la casa de Don Enrique Meiggs. 

En octubre de 1866, Don Macario Ossa, mayordomo de la Cofradía Nacional del Carmen, gestionó la donación de dicha Imagen con su legítima dueña, la cual se niega rotundamente, accediendo sólo a facilitarla para la ocasión. Esto ocurrió mientras la Cofradía se encontraba asentada en el Templo de San Agustín de la ciudad de Santiago. En 1874, fallecida su dueña, los mayordomos de la Cofradía, señores. Francisco Echeñique y Macario Ossa, la adquieren legítimamente en propiedad definitiva para la secular y honorable Cofradía. La compra se realizó por la suma de $ 700 a don Valerio Quesney Ossa, el heredero. 

La escultura representa a la Santísima Virgen de cuerpo entero, cargando en su brazo izquierdo al Niño Jesús. Está tallada en madera de tilia europea, según se supo con las pruebas que se le efectuaron en la restauración (después de haber sufrido un atentado incendiario). Posee ojos de cristal y está vestida ricamente según la costumbre europea de vestir las imágenes sagradas. 

Estuvo casi 100 años en la Basílica del Salvador (Almirante Barroso esquina de Huérfanos), pero el terremoto de 1985 obligó a trasladarla a la Catedral de Santiago y luego a la Parroquia El Sagrario donde fue entronizada el 16 de julio de 2004. 


Iglesia del Salvador en sus primeros años, sin las ornamentaciones que le fueron incorporadas en las décadas siguientes.
Fotografía de 1900.
Museo Histórico Nacional.

Iglesia Matriz de Copiapó.
A la izquierda se observa, antes de su traslado a la capital, la imagen de la Virgen del Carmen que está actualmente en la Parroquia del Sagrario, Santiago.
Fotografía c.1860.
Gentileza Rony Ibacache Monroy.

Atentado a la Imagen

El 18 de abril de 2008, un hombre con sus facultades mentales perturbadas, ingresó a la Parroquia del Sagrario (Catedral Metropolitana) y prendió fuego con una vela a la imagen de la Virgen ubicada en el altar principal, lo que provocó el incendio de ésta y tuvo como resultado un gran daño a la escultura de la Virgen del Carmen. La noticia desató gran revuelo en el mundo católico. Más tarde, la misma persona fue capturada por causar otro incendio en Viña del Mar y quemar más de siete hectáreas. 

Fue tan grande el daño que se produjo en la Imagen, que se pensó que era prácticamente imposible restaurarla. De hecho, muchas organizaciones internacionales a las que se les consultó su opinión señalaron que esto sería muy difícil. Sería casi un milagro recuperarla…y se logró. 

La Imagen fue restaurada por expertos del Centro Nacional de Conservación y Restauración (CNCR); su trabajo duró aproximadamente un año y contó con la asesoría de profesionales de gran prestigio a nivel mundial. 

Fuentes:
· www.emol.com/noticias/nacional/2008/04/18/300916/queman-imagen-de-la-virgen-del-carmen-que-se-encontraba-en-la-catedral.html
· www.es.wikipedia.org/wiki/Virgen_del_Carmen_de_Chile


Restauración de la Imagen

El equipo a cargo de la restauración estuvo conformado por 24 profesionales, nacionales y extranjeros, coordinado por la entonces directora del CNCR (Centro Nacional de Conservación y Restauración), señora Magdalena Krebs, y compuesto por conservadoras/restauradoras del Laboratorio de Monumentos -responsable del estudio-; profesionales de los laboratorios de Pintura, Análisis y Documentación Visual del CNCR; y las historiadoras Olaya Sanfuentes y Pilar Hevia del Instituto de Historia de la Universidad Católica. En este proceso, se contó además con el completo apoyo y colaboración de las Camareras de la Virgen del Carmen y del Padre Francisco Javier Manterola, párroco del Sagrario y Santuario Nacional de la Virgen. 

Para realizar el trabajo de restauración se recabaron antecedentes en la literatura sobre la restauración de objetos de madera policromada que habían sufrido daño por incendios y asimismo se recopiló información de profesionales de algunos de los principales centros de restauración en el mundo que habían enfrentado una desafío similar. Esta primera etapa de evaluación, además se basó en una completa documentación fotográfica de la imagen y de los detalles de su deterioro. También se realizaron análisis con el fin de identificar la madera con la que fue elaborada, los procesos de construcción, los materiales utilizados y las posibles intervenciones anteriores. Esto se determinó mediante tomas radiográficas, fluorescencia ultravioleta, análisis de fibras y análisis de madera, entre otros recursos. A partir de los resultados de estos estudios, se realizaron las pruebas que permitieron determinar la factibilidad de la restauración tanto de la Virgen como del Niño. 

Luego de su restauración, la Imagen retornó a su altar en el Sagrario de la Catedral el 7 de julio de 2009 y la ceremonia para celebrar el regreso estuvo encabezada por el cardenal Francisco Javier Errázuriz Ossa, arzobispo de Santiago, y contó con la presencia de muchos obispos, sacerdotes y fieles. 

Fuentes:
· http://www.dibam.cl/centro_conservacion/noticias.asp?id=9199
· http://www.terra.cl/actualidad/index.cfm?id_cat=302&id_reg=1212623